La Dirección General de Tráfico (DGT) ha introducido una normativa que ha generado un intenso debate en el ámbito vial. Desde este 2025, los ciclistas podrán circular en sentido contrario en calles de un solo sentido en determinadas condiciones. La medida, implementada con el objetivo de fomentar el uso de la bicicleta y hacer las ciudades más amigables con los ciclistas, no ha estado exenta de polémica.
Si bien la medida se aplica únicamente en calles con limitaciones de velocidad inferiores a 30 km/h y está condicionada a la correcta señalización de las vías, muchos la consideran arriesgada. Las opiniones están divididas entre quienes ven esta iniciativa como un paso hacia la movilidad sostenible y quienes temen que aumente la siniestralidad en las ciudades.
5Un cambio inspirado en Europa
Es importante destacar que esta normativa no es una innovación exclusiva de España. Países como Bélgica, Francia o los Países Bajos ya permiten a los ciclistas circular en sentido contrario en calles específicas desde hace años. En estas naciones, la medida ha demostrado ser efectiva cuando se combina con infraestructuras adecuadas y campañas de concienciación.
No obstante, expertos en movilidad urbana advierten que el éxito de esta iniciativa dependerá de cómo se implemente en España. Las ciudades deben asegurarse de contar con una señalización clara y visible, además de realizar un seguimiento continuo para evaluar su impacto en la seguridad vial.