En la búsqueda de mayor seguridad en nuestras carreteras, los expertos automovilísticos han sugerido la posibilidad de utilizar neumáticos de invierno durante la temporada estival. Esta medida preventiva busca asegurarnos un mejor rendimiento en caso de heladas o nevadas inesperadas, aunque muchos conductores aún no confían lo suficiente en esta solución.
El uso de neumáticos de invierno en verano puede brindar una mayor protección al circular sobre superficies mojadas o heladas, y algunos conductores han considerado esta opción como una medida adicional de seguridad. Sin embargo, ¿es adecuado circular con neumáticos invernales en pleno verano? A lo largo de este artículo, exploraremos esta pregunta y descubriremos todo lo que necesitas saber sobre el uso de neumáticos de invierno en condiciones calurosas.
3¿Cual es el momento apropiado para usar estos neumáticos?
Aunque es legal circular con neumáticos de invierno en verano en España, los fabricantes de neumáticos recomiendan cambiarlos por neumáticos de verano durante esta estación. Los motivos para hacerlo así están relacionados con el confort, el consumo, la duración, la precisión y la seguridad.
En primer lugar, los neumáticos de invierno pueden generar un mayor ruido de rodadura en comparación con los de verano, afectando el confort del conductor y los ocupantes del vehículo. Además, los compuestos de los neumáticos invernales ofrecen mayor resistencia a la rodadura en climas veraniegos, lo que se traduce en un aumento del consumo de combustible. Asimismo, los neumáticos de invierno, al estar diseñados para temperaturas frías, sufren un mayor desgaste en condiciones cálidas, acortando así su vida útil.
En términos de seguridad, los neumáticos de invierno presentan una distancia de frenado superior a temperaturas superiores a 12°C en comparación con los neumáticos de verano. Además, su mayor profundidad de dibujo y diseño pueden afectar la precisión de la trayectoria del vehículo en condiciones de calor.