Debemos considerar al C5 X como nuevo buque insignia de Citroën porque, para empezar, propone un tamaño generoso: 4.805 milímetros de longitud, 1.865 de anchura y 1.485 de altura. Y gracias a una distancia entre ejes de 2.785 milímetros en la firma gala destacan entre sus atributos la gran amplitud, tanto delante como en unas plazas traseras que, siempre según Citroën, ofrecen un espacio para piernas excepcional , una anchura de primer nivel y una altura al techo también estupenda. Eso, la habitabilidad, es uno de los ingredientes de la filosofía Citroën Advanced Comfort que la casa del doble chevrón aplica a sus modelos desde hace años. Aunque hay otros factores, como el cuidado mullido de los asientos Advanced Comfort o la utilización de los exclusivos Amortiguadores Progresivos Hidráulicos, que en el C5 X de mecánica híbrida enchufable son aún más evolucionados: implican suspensión activa, con tres modos a elegir y un comportamiento optimizado sobre todo en curva.
Pero el perfil de este nuevo modelo de Citroën del segmento D denota también funcionalidad, y eso se traduce en un maletero de 545 litros con las cinco plazas en uso que podemos ampliar hasta 1.640 litros cuando abatimos el respaldo divisible de la segunda fila, operación que, de paso, crea un suelo de carga completamente plano. La cortinilla que cubre el maletero es solidaria con el portón, y éste, para facilitar aún más la estiba, cuenta con apertura eléctrica con función manos libres. Asimismo, por el habitáculo se han repartido un buen número de espacios para guardar objetos.
Presume de tecnología
Comodidad, espacio y practicidad no parecen ser las únicas virtudes de un interior que apuesta también por la tecnología al máximo nivel, destacando un interfaz de comunicaciones completamente nuevo en torno a la pantalla táctil central de 12 pulgadas (puede manejarse como si fuese una Tablet) y apoyado en el reconocimiento de voz natural, o el denominado Extended Head Up Display, que es un sistema de proyección en color de grandes dimensiones (simula una pantalla de 21 pulgadas) sobre el parabrisas, un primer paso hacia la realidad aumentada. Así, la persona que conduce no tiene necesidad de apartar la vista de la carretera para disponer de cualquier información que desee consultar.
Además, su arsenal tecnológico en materia de ayudas a la conducción le introduce en el universo de la circulación semiautónoma de Nivel 2, para lo que se sirve de radares, cámaras y sensores. Destaca el Highway Driver Assist, que combina el regulador adaptativo con función Stop&Go y la ayuda de mantenimiento en carril, de modo que el conductor no necesita gestionar la velocidad o la trayectoria porque el coche se ocupa de esas funciones. Y otros dispositivos avanzados del C5 X son el control de ángulos muertos de larga distancia, el Rear Cross Traffic Alert que nos avisa si hay peligro de colisión cuando damos marcha atrás y se acerca otro vehículo, el Top 360 Vision que facilita las maniobras mostrando en la pantalla táctil el entorno exterior del coche, o el acceso y puesta en marcha manos libres Proximity, que abre y cierra automáticamente las puertas cuando el conductor se acerca al vehículo o se aleja de él.
Mecánicas PureTech o Hybrid
Sobre las mecánicas que encontraremos en la gama, Citroën no da por ahora una información pormenorizada, aunque sabemos que no habrá diésel y que el cliente podrá elegir entre motores de gasolina y un híbrido enchufable de 225 CV para el que se anuncian más de 50 kilómetros de autonomía eléctrica en modo ZEV y una velocidad máxima de 135 km/h cuando circulamos sin emisiones. A falta de confirmación, todo indica que se trata de la misma mecánica empleada en el Citroën C5 Aircross Hybrid, es decir, un 1.6 Puretech de gasolina con 180 CV asociado a un motor eléctrico delantero. Porque todos los C5 X serán inicialmente de tracción delantera, aunque la plataforma permitiría ofrecer en un futuro la tracción total, lo que cuadra bastante con el estilo aventurero y familiar del nuevo coche francés. Y el camino más lógico sería apostar por una mecánica híbrida enchufable Hybrid4 como la ofrecida ya por el DS 7 Crossback, el Opel Grandland X o el Peugeot 3008, en todos los casos con doble motor eléctrico y 300 CV de potencia.
Citroën no precisa cuál es la distancia libre al suelo, pero sí que es más generosa que en un familiar convencional y que casi todas las versiones del C5 X equiparán grandes neumáticos de 72 centímetros de diámetro, sobre llantas de 19 pulgadas. Además, toda la gama incluirá de serie los faros LED.
