En el corazón del País Vasco, en la pequeña localidad costera de Lekeitio, se ha desatado una controversia que ha dejado a muchos sorprendidos. El Ayuntamiento, liderado por Bildu, ha implementado una nueva ordenanza que regula el aparcamiento en sus calles de una manera que pocos podrían haber anticipado. A partir de ahora, si no vives en Lekeitio o en un municipio cercano, aparcar en sus calles se ha convertido en una tarea casi imposible. Con la introducción de un sistema de zonas de aparcamiento por colores, el municipio ha dejado clara su intención de priorizar a los residentes locales, dejando a los visitantes con opciones limitadas y, en muchos casos, costosas.
1Pocas sonrisas entre residentes y visitantes
La decisión de dividir la localidad en tres zonas de aparcamiento –verde, roja y azul– no ha sido recibida con entusiasmo, ni por los residentes ni por los turistas. Mientras que algunos vecinos aprecian la intención del Ayuntamiento de mejorar la disponibilidad de aparcamiento en una localidad que, durante la temporada alta, se ve invadida por turistas, muchos critican la complejidad y la exclusividad del nuevo sistema.
La zona verde, destinada exclusivamente a los residentes de Lekeitio y de los municipios cercanos, es la única que parece ofrecer un poco de alivio a los habitantes locales. Por otro lado, la zona roja, que permite a repartidores y transportistas aparcar por un máximo de 30 minutos, ha sido catalogada como insuficiente por aquellos que dependen de la logística para sus negocios. Finalmente, la zona azul, reservada también para residentes, pero con un límite de ocupación de 24 horas, ha dejado a los turistas y visitantes con muy pocas alternativas para estacionar sus vehículos.
