Subir al autobús es un gesto que todos hacemos en mayor o menor medida, pero el ciudadano agradece siempre que no le cobren demasiado por el transporte público. En España, el gasto medio por persona en transporte -público y privado- fue de 1.101,66 euros en 2020, así que no es ninguna broma.
Hay que decir que las tarifas del transporte público en España se mueven en la parte baja del ranking en comparación con otros países europeos, lo cual es de agradecer. Pero hay un paso más que, ya puestos, es algo mucho más importante: la gratuidad del servicio.
6Barcelona, en contra del transporte público gratuito
En general, no es de extrañar que los ayuntamientos sean partidarios de ofrecer otras alternativas a la gratuidad del billete. Es el caso de Barcelona, donde aseguran desde el consistorio que esta decisión pone en peligro la calidad del servicio porque repercute directamente en los presupuestos. Es otra forma de verlo, aunque seguro que le gusta menos al usuario…
La parte buena del transporte público de Barcelona es que desde hace dos años mantiene congeladas las tarifas, algo que al menos se agradece porque el coste de la vida y el combustible podría invitar a una decisión totalmente opuesta.
