Los coches de combustión han sido objetivo final en el Parlamento Europeo. Durante las sesiones del pasado mes de febrero, concretamente el día 14, el Parlamento Europeo ha aprobado en pleno, el acuerdo entre instituciones para fomentar en exclusiva la venta de turismos y furgonetas “cero emisiones” (es decir, eléctricos, de hidrógeno o de combustibles de nueva generación) a partir de enero de 2035.
La votación a favor de estas medias legislativas, que necesitaran del refrendo de la totalidad de los miembros de la Unión Europea, y cuyos resultados fueron; 340 votos a favor, 279 en contra y 21 abstenciones, supone la determinación de no comercializar vehículos nuevos de combustión, incluidos los mixtos (híbridos enchufables).
Frente a esta nueva Ley que se nos presenta y ante las dudas que pueda generar a todos los conductores, Bipi, empresa española de automóviles por suscripción, ha querido recoger algunas de las principales claves para el usuario que marcarán el panorama del sector automovilístico del futuro.
1Las cosas que están claras y las que no
Con este escenario, las dudas sobre quien podrá tener en propiedad un vehículo, llegada la fecha en ciernes, queda expuesta frente a los usuarios, y a pesar de que numerosos estudios presentan, que el coste de los coches eléctricos en torno al año 2026, verán regulados sus precios, fruto de la incentivación administrativa y el acomodo de las infraestructuras, y permitirá el acceso de cualquier ciudadano a este tipo de coches, parece imposible despejar la incertidumbre de las nuevas leyes.
Lo que parece meridianamente claro a pesar de estas imposiciones es que no afectarán (por el momento) a la compraventa de vehículos usados. Es decir, quien compre un coche con motor de combustión nuevo actualmente o en los próximos años, podrá venderlo pasado 2035 sin, en teoría, problema alguno.
Esto no significa que el anuncio no genere inquietud entre quienes están valorando adquirir un coche nuevo, porque saben que en el futuro se encontrarán con un mercado más regulado a la hora de poder deshacerse de su coche usado.