En España, la problemática de los coches abandonados es más común de lo que se podría pensar, con aproximadamente 20.000 vehículos dejados en garajes privados o talleres, según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT). Cada año se estima que alrededor de 50.000 vehículos son abandonados.
El abandono de un coche no es un asunto trivial, ya que puede acarrear graves consecuencias tanto para el propietario como para la comunidad en general. Te contamos ahora en profundidad las responsabilidades del propietario y la administración, así como el proceso de achatarramiento de un vehículo abandonado.
2Obligaciones del propietario
Los propietarios de vehículos tienen la obligación de dar de baja un coche si ya no van a utilizarlo, según lo establecido por la DGT. No hacerlo puede resultar en la continua recepción de impuestos de circulación, los cuales deberán ser pagados por el titular del vehículo. Además, un coche abandonado corre el riesgo de ser robado, lo que puede complicar aún más su situación legal y administrativa.
El abandono de un coche también puede representar un peligro para la seguridad pública. Un vehículo abandonado puede tener averías que dañen a otros vehículos o peatones cercanos, o incluso puede incendiarse. En caso de que ocurra un accidente relacionado con el coche abandonado y el propietario no tenga un seguro en vigor, deberá hacerse cargo de las indemnizaciones correspondientes.
