El coche se volvió un blanco fácil para robar, tal es así que hasta se ha evolucionado en los últimos años, y los ladrones han cambiado sus tácticas. Ya no se centran tanto en llevarse vehículos completos, sino en robar componentes específicos de alto valor que pueden ser vendidos fácilmente en el mercado negro. En el Reino Unido, una preocupante tendencia llamada «Eye-Snatching» ha surgido, en la cual los faros delanteros de coches premium se han convertido en el objetivo predilecto de los delincuentes.
El diseño de los faros delanteros ha avanzado considerablemente en las últimas décadas. Lo que antes eran simples bombillas se ha transformado en sistemas tecnológicos avanzados, como los faros Matrix LED o los faros láser, presentes en vehículos de alta gama. Estos componentes no solo son altamente sofisticados, sino también extremadamente caros. Un ejemplo claro es el BMW Serie 4, cuyos faros láser cuestan alrededor de 3.000 dólares cada uno, mientras que los faros Matrix LED del Audi Q7 alcanzan precios de hasta 4.300 dólares por unidad.
Por qué los ladrones eligen robor los faros delanteros del coche
Debido a su posición expuesta, los faros delanteros se han convertido en blancos fáciles para los ladrones. Aunque removerlos puede causar daños adicionales al parachoques, guardabarros o capó, el robo de estos componentes sigue siendo mucho más rápido y menos arriesgado que robar el coche entero. Además, vender faros en el mercado negro o a compradores desprevenidos en línea es más sencillo y seguro para los delincuentes. Los compradores suelen pensar que están haciendo una buena compra cuando en realidad están adquiriendo piezas robadas.
Philip Swift, director técnico de la empresa Claims Management & Adjusting (CMA), ha comentado sobre esta nueva ola de robos en una entrevista con Fleetworld. Swift señaló que «estos ataques son rudimentarios pero efectivos: arrancan los faros delanteros y se van rápidamente». Aunque los robos de faros no suelen resultar en la pérdida total del vehículo, las reparaciones son costosas y los propietarios enfrentan una considerable factura por daños. Para Swift, este fenómeno es comparable a los robos de convertidores catalíticos, que también han sido una tendencia creciente en el mundo del crimen automotriz.
Cada vez más coches afectados: el gran aumento de casos en el último año
El robo de faros delanteros no solo afecta a los propietarios de vehículos, sino que también está teniendo un impacto en las primas de seguros. A medida que aumentan estos incidentes, las compañías aseguradoras ven la necesidad de ajustar sus tarifas para cubrir los costos de reparación. Al mismo tiempo, las fuerzas de seguridad enfrentan un desafío adicional al tratar de combatir este tipo de delito, que se ha vuelto más frecuente y difícil de rastrear.
Según la Oficina Nacional de Estadísticas del Reino Unido, los incidentes de manipulación de vehículos aumentaron un 2% entre abril de 2023 y marzo de 2024, pasando de 52.268 a 53.369 casos. Esta cifra incluye robos de componentes como ruedas, neumáticos y faros delanteros. Los delincuentes se están aprovechando del valor de las piezas sueltas, ya que los coches desmantelados pueden generar más ganancias que aquellos vendidos intactos.