Hace poco más de una década, los coches eléctricos eran una rareza en las carreteras, pero en la actualidad representan un 6-7% de las ventas de automóviles. Aunque se esperaba que esta transición se acelerara para 2023, algunos argumentarían que el cambio está siendo más lento de lo previsto, especialmente considerando que en poco más de 10 años, los coches de combustión interna serán cosa del pasado.
No obstante, se avecina una verdadera avalancha de modelos eléctricos en los próximos dos años. Esto promete abaratar la tecnología y, con suerte, impulsar la adopción de los coches eléctricos.
6Los precios seguirán disminuyendo
Los precios de los coches eléctricos han estado disminuyendo gradualmente en los últimos años, y esta tendencia debería continuar. A medida que la producción se escala y las tecnologías se vuelven más eficientes, los coches eléctricos se volverán más asequibles.
Esperar hasta 2025 permitirá a los compradores acceder a coches eléctricos a precios más competitivos en comparación con los modelos de combustión interna. Esto hará que la transición a la movilidad eléctrica sea más accesible para un público más amplio.