El coche electrico emerge como una opción prometedora para un futuro más limpio y eficiente en el transporte, en un mundo donde la movilidad sostenible se posiciona como una prioridad.
Sin embargo, junto con el entusiasmo por esta innovadora tecnología, persisten una serie de expectativas y percepciones que a menudo difieren de la realidad. En este artículo, exploraremos las expectativas comunes que rodean a los vehículos eléctricos y descubriremos cómo se comparan con las realidades de conducir uno.
Desde el costo hasta la autonomía y la infraestructura de carga, desmitificaremos los conceptos erróneos y revelaremos la verdadera experiencia de poseer y conducir un vehículo eléctrico en la actualidad.
3La evidencia de un problema infraestructural
La disponibilidad de puntos de recarga es otro aspecto crucial en la percepción de los vehículos eléctricos. Según la encuesta de Carwow, el 81% de los encuestados consideran que no hay suficientes puntos de recarga, lo que desalienta la adopción de los EV.
Sin embargo, los datos de la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica (AEDIVE) muestran un panorama más alentador, con miles de puntos de recarga en funcionamiento y en proceso de instalación en toda España. Si bien es cierto que aún queda trabajo por hacer, la infraestructura de recarga está creciendo rápidamente para satisfacer la creciente demanda de vehículos eléctricos.