Las especulaciones no se hicieron esperar, despertando comentarios que iban desde el entusiasmo hasta la incredulidad, mientras en las calles de Madrid se exhibía un telón de escenario que camuflaba intrigante la sorpresa. Finalmente, la verdad salió a la luz: no se trataba de un lanzamiento real, sino de una campaña creada por Midas, líder en mantenimiento y movilidad sostenible, como parte del quinto aniversario de su iniciativa #EllasConducen. El propósito no era vender coches, sino poner sobre la mesa una conversación incómoda pero urgente: ¿por qué seguimos pensando que las mujeres necesitan un coche diferente?
CARmela, un coche diseñado mediante inteligencia artificial, no es más que el reflejo de los prejuicios que persisten sobre las capacidades de las mujeres al volante. Pero también es un espejo para quienes todavía creen que la industria automotriz debe seguir encasillando a las conductoras bajo estereotipos que, en pleno 2024, ya no tienen cabida.
3#EllasConducen: un motor de cambio en el sector
Con #EllasConducen, Midas no solo busca visibilizar estos prejuicios, sino también romper con ellos. Desde hace cinco años, la campaña trabaja para desmontar mitos y abrir un diálogo sobre igualdad en el mundo del motor. Este año, la piloto Ana Carrasco, embajadora de la iniciativa, se suma nuevamente al proyecto para reforzar su mensaje: “La igualdad no es un lujo, es una necesidad. El talento y la pasión no tienen género, y campañas como esta nos acercan a un sector automotriz más inclusivo”.
Además de su mensaje de concienciación, la campaña también se traduce en acciones concretas. En colaboración con Cruz Roja, Midas ha puesto en marcha un programa de formación en mecánica dirigido a mujeres en situación de vulnerabilidad. Este proyecto busca no solo capacitar a nuevos profesionales, sino también cambiar la narrativa en torno a las mujeres en el ámbito técnico y automotriz.