Las restricciones por contaminación preocupan a una buena parte de conductores de vehículos de combustión, porque los que no tienen distintivo medioambiental ya ven limitado el acceso a la mayoría de Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) y los que tienen etiqueta B y C lo sufrirán más pronto que tarde. Por eso, lo que muchos se preguntan es: ¿puedo convertir mi coche gasolina o diésel en uno GLP para obtener la Etiqueta ECO?
Lo primero, estos son los vehículos de la DGT que pueden tener etiqueta ECO:
- Híbridos enchufables con autonomía inferior a 40 kilómetros.
- Híbridos no enchufables (HEV).
- Vehículos propulsados por gas natural.
- Vehículos propulsados por gas natural comprimido (GNC) o gas licuado del petróleo (GLP).
Por tanto, un turismo gasolina o diesel que haya sido transformado a GLP sí que puede tener en el parabrisas la etiqueta ECO de forma legal. ¿Cómo?
3¿Cuánto cuesta transformar el coche a GLP?
Esta técnica, conocida como retrofit, puede costarnos entre unos 1.800 y 3.000 euros, aunque lógicamente el importe final varía según el tipo de coche, el número de cilindros y lo complicada que sea la instalación. Lo más habitual es convertir modelos de gasolina a GLP, así que en los diesel es más caro y también en modelos de alta gama.
¿Merece la pena? Según datos del RACE, esta instalación se amortiza en unos 30.000 a 50.000 kilómetros, sobre todo si viajas mucho y tienes un motor que consuma bastante. Tienes que saber que el GLP consume alrededor de un 10% más que la gasolina (si ahora consume 7 litros a los 100 km, va a consumir 8 litros o un poco más a los 100), pero el precio puede ser hasta de un 45% menos. Y también hay que tener en cuenta que aunque España tiene una red de estaciones de servicio bastante potente, solo hay unas 800 que suministran GLP.
