El Gobierno lanza su arsenal al frente más jugoso que tienen para tapar el ‘Caso Koldo’. No se ha hecho esperar. El informe de la Agencia Tributaria que sustenta la denuncia que la Fiscalía ha presentado contra Alberto González Amador evidencia cómo la pareja de la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso usó dos sociedades sin trabajadores contratados ni apenas medios materiales para canalizar sus ingresos. La principal, Maxwell Cremona –que facturó 3,7 millones en dos años–, no tiene empleados por cuenta ajena pero sí consta a su nombre un coche de lujo: un Porsche Panamera.
1Uso de vehículos de alta gama como utilitarios
La investigación revela el uso de vehículos de alta gama, como un Porsche Panamera y un Maserati, por parte de la pareja de Isabel Díaz Ayuso, destinados a actividades cotidianas. Estos lujosos automóviles, valorados en cientos de miles de euros, fueron registrados a nombre de sociedades que, según los informes de la Agencia Tributaria, se utilizaban para fines poco claros y, en muchos casos, para evadir impuestos.
Alberto González Amador, compañero de la presidenta madrileña, presuntamente utilizaba estos vehículos para sus desplazamientos habituales, a pesar de que estaban registrados a nombre de empresas que no tenían relación directa con su actividad laboral. Esta revelación ha generado un gran revuelo, ya que los vehículos de alta gama son comúnmente asociados con un estatus social elevado y no con un uso diario como un «utilitario» convencional.