Cuando decidimos comprar un coche de segunda mano, uno de los principales condicionantes a tener en cuenta es la seguridad en la transacción. Se trata de una inversión de gran vista, romper con los principios de precaución y consideración harán que el producto adquirido no tenga el nivel de calidad esperado. Por suerte, existen formas de evitar ser timados al comprar un coche de segunda mano, sigue estas indicaciones para conseguirlo.
Al hacer tu búsqueda, no te dejes impresionar fácilmente por un modelo de coche en particular. Investiga sobre el modelo y marca para asegurarte de que es lo que realmente deseas. Analiza minuciosamente los informes de seguridad que ofrecen los sitios web de la industria de la automoción, estos reportes muestran los problemas de seguridad y defectos mecánicos que presentan los diferentes vehículos. Estos informes te ayudarán a determinar las plataformas antiguas, obsoletas o problemáticas, así como los coches última generación con los cuales puedes plantearte tu compra.
22. Examinar la carrocería
Es necesario evaluar el exterior del vehículo para asegurarse de que está en condiciones óptimas. Esto incluye revisar la pintura, el metal, las luces delanteras, traseras y laterales, los marcos de las puertas y la tapa del motor.
Inspecciona los bordes del vehículo para localizar pequeños defectos o abolladuras y comprueba las condiciones de los neumáticos del automóvil. Es importante asegurarse que los neumáticos son del mismo tamaño, marca y dibujo. Además, comprueba el nivel de presión de los mismos, y que el volante no tenga playa.
