Ver nuestro coche protagonizando una serie televisiva o un largometraje, es muy probable que reafirme nuestra decisión de haberlo adquirido, y quizás no sea el mejor coche del mundo, pero es el nuestro.
El mundo del motor, el cinematográfico y televisivo, indiscutiblemente maridan a la perfección. No hay mejor escaparate para una marca de coches, que ser protagonista en la gran pantalla, a nivel mundial, o en la caja tonta, de manera universal.
Y muchos son los vehículos que han disfrutado de este protagonismo, bien por su exclusividad, por su originalidad e incluso por su excéntrica presencia.
5Un Ford Torino, mas que distinguido
En 1975, la ABC lanzó una nueva serie centrada en las andanzas de dos detectives del departamento de policía de la ficticia Bay City (California). David Starsky (Paul Michael Glaser) y Ken «Hutch» Hutchinson (David Soul) formaron una pareja televisiva que entretuvo a la audiencia durante más de noventa episodios repartidos en cuatro años.
El modelo elegido fue el Ford Gran Torino 351 Windsor de 1975. Incorporaba un motor V8 de 460 pulgadas cúbicas. La matrícula que se le colocó fue la 537 ONN. En la segunda temporada se cambió por un modelo de 1976 que ya se mantuvo hasta el final. Durante el rodaje se utilizaban siempre dos modelos: uno para las escenas de calle y otro que incorporaba una cámara en la parte delantera para grabar a los protagonistas, de forma directa, en las clásicas persecuciones por la ciudad.
Tal fue el éxito del coche entre el público que la Ford decidió sacar a la venta una edición limitada de 1000 unidades del Gran Torino, tuneado prácticamente igual al que aparecía en pantalla.
