Ya sea por las restricciones impuestas a los coches más contaminantes para circular por las grandes ciudades o por conciencia ecológica, lo cierto es que parece que, poco a poco, la transición hacia la movilidad sostenible empieza a calar entre los españoles.
De hecho, entre los usuarios que tienen previsto estrenar coche en los dos próximos años hay un 21% que aseguran que se decantarían por un vehículo electrificado, bien un híbrido enchufable o un coche 100% eléctrico, duplicando la intención de compra de los modelos de gasolina y diésel, que cuentan con un 11% de adeptos.
Estas son las conclusiones a las que llega el estudio ‘Sostenibilidad y Consumo 2023’ realizado por el Observatorio Cetelem del BNP Paribas Personal Finance, un informe que analiza la intención de compra del coche electrificado en nuestro país.
3Los cargadores, otro de los problemas
Los cargadores y su instalación suponen otro de los obstáculos al coche electrificado. El 66% de los potenciales compradores no se muestra interesado en instalar un punto de recarga en su casa. En concreto, la mitad explican que no disponen de las condiciones necesarias para ello, como sería tener una vivienda unifamiliar o una plaza de garaje propia. Además, hay un 33% de usuarios que explica que el coste de la instalación es muy alto, mientras que el 12% prefiere cargar en los puntos de acceso público.
Otro punto que llama la atención es que el 83% de los usuarios dice no conocer las ayudas del Plan Moves para la instalación de puntos de recarga.
Sí hay un 34% de compradores que estaría interesado en instalar un cargador en casa. De ellos, el 53% dispone de plaza de garaje propia en aparcamiento comunitario y el 47% de vivienda unifamiliar. Las principales razones por las que los encuestados instalarían un punto de recarga en su hogar son el ahorro de energía y económico (36%), la seguridad y comodidad (29%); y, en menor medida, la concienciación con el medio ambiente y la conservación de la batería del vehículo (19% y 16% respectivamente).