El auge de los coches eléctricos, liderado en gran parte por Tesla, ha revolucionado el sector automovilístico. Sin embargo, a pesar del éxito y la innovación de Tesla, un fenómeno sorprendente ha emergido entre sus clientes. Una cantidad significativa de propietarios de Tesla han decidido dejar atrás sus vehículos eléctricos y volver a modelos con motor de gasolina. Esta tendencia, que podría parecer contradictoria en un mundo cada vez más enfocado en la sostenibilidad, plantea preguntas sobre la satisfacción real de los usuarios con sus coches eléctricos. ¿Qué motiva a estos conductores a renunciar a Tesla y qué coches eligen en su lugar?
3Una tendencia que persiste con el tiempo
Aunque la proporción de propietarios de Tesla que regresan a los motores de gasolina ha disminuido en comparación con años anteriores, la tendencia persiste, lo que indica que aún queda camino por recorrer para que los coches eléctricos logren una aceptación masiva y sostenida. En 2019, por ejemplo, el 71% de los Tesla vendidos se cambiaron por coches de gasolina, mientras que solo el 10% de los propietarios optaron por otro coche eléctrico. Este cambio de comportamiento refleja tanto una mejora en la tecnología de los coches eléctricos como una persistente insatisfacción con ciertos aspectos de la experiencia de propiedad.
