La Unión Europea ha dado un giro significativo en su política de combustibles en los últimos meses, transformando lo que inicialmente parecía ser una prohibición categórica en una medida más matizada.
La confirmación oficial de este cambio de rumbo tiene sentido en la aprobación de la Euro 7 light, que establece límites a las emisiones de microplásticos de neumáticos y ferodos, mientras que la UE ha decidido dar la bienvenida oficialmente a los productos sintéticos.
También conocidos como e-fuels, representan una esperanza en la búsqueda de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y mitigar los impactos ambientales asociados con el transporte.
5El papel clave para la vida de los motores de combustión
Aunque los biocombustibles de segunda generación aún no pueden considerarse completamente libres de emisiones, se espera que lo sean en un futuro próximo a medida que se optimicen los procesos de producción y se implementen tecnologías de captura y almacenamiento de carbono.
La creciente disponibilidad de biocombustibles renovables en estaciones de servicio, junto con el compromiso de las compañías petroleras en su producción y comercialización, subraya el papel clave que pueden desempeñar en la transición hacia una economía baja en carbono.
