Indudablemente, la tecnología aplicada a la comodidad del coche ha llegado a límites que parecían impensables hace tan solo unos años. Estos son sistemas tan novedosos, como los sensores de lluvia para limpiar el parabrisas de una manera automática o los sensores de luz en los faros, cuya activación va en función de las condiciones lumínicas del momento. Además, aportan seguridad y ayudan a reducir distracciones al volante.
A continuación, en el artículo te explicaremos cómo funciona dichos elementos y la forma en que debes reemplazarlo en caso de avería.
5Si el parabrisas está dañado, ¿tengo que reemplazar el sensor de luz?
Concretamente, los parabrisas con pequeñas mellas o rajaduras pueden repararse. Por ende, esto colabora a evitar reemplazar el sensor de luz. En cambio, si el parabrisas posee un desperfecto más grande que un teléfono móvil, debería ser sustituido, junto con cualquier sistema tecnológico unido a él. Igualmente, los sensores de luz están disponibles para comprarlos en el mercado, pero la reinstalación es la mejor manera de asegurarse de que funcionará correctamente.