Cuando compras un coche nuevo, el proceso de rodaje es un tema importante que genera muchas preguntas. Este término, que puede sonar algo antiguo para algunos, es clave para asegurarte de que tu nuevo vehículo dure el mayor tiempo posible y funcione de manera eficiente. El rodaje es el proceso durante los primeros kilómetros del vehículo en el que los componentes del motor y la transmisión se ajustan, se adaptan y se asientan, asegurando un rendimiento óptimo.
Aunque muchos conductores pueden pensar que este procedimiento es algo innecesario en la actualidad, la realidad es que sigue siendo importante, aunque de una forma diferente a como se hacía hace unos años. Los avances en tecnología y los materiales de fabricación han transformado la manera de hacer este rodaje, y aunque no es necesario con la misma rigurosidad de antes, aún es recomendable seguir algunos pasos para maximizar la vida útil de tu coche.
2Revoluciones del motor y Velocidades altas:
Uno de los puntos más importantes durante el rodaje de un coche nuevo es controlar las revoluciones del motor. Se recomienda no superar las 3.500 rpm en los coches diésel y las 4.500 rpm en los de gasolina durante los primeros 2.000 kilómetros. Esto es esencial para que los cilindros, pistones y la transmisión se ajusten y se acoplen correctamente. Llevar el motor a altas revoluciones durante el rodaje puede resultar en un desgaste prematuro de estas piezas. Además, se trata de no forzar el motor manteniendo las revoluciones demasiado altas durante largos períodos, ya que esto podría generar un sobrecalentamiento innecesario.
También es importante moderar la velocidad. En los coches diésel, no se recomienda superar los 150 km/h, y en los coches de gasolina, los 160 km/h. Mantener una conducción más suave y moderada permitirá que todos los componentes internos se ajusten poco a poco, garantizando su funcionamiento adecuado a largo plazo. Aunque puedas sentir que el coche tiene más potencia disponible, recuerda que aún está en la fase
