El total de kilómetros recorridos es un punto esencial a tener en cuenta a la hora de comprar un coche de segunda mano. Puede proporcionar una idea de la vida útil y el estado general del automóvil. Este detalle es muy relevante, pero tampoco podemos dejarnos engañar por él.
No solo hay que tener cuidado con los estafadores que trucan el cuentakilómetros para aparentar menos desgaste. Hay que tener en cuenta una serie de factores, para poder interpretar qué kilometraje es adecuado. Un número más bajo no siempre es síntoma de ser una mejor elección. Si vas a comprar un coche de segunda mano, sigue leyendo para asegurarte de tomar la mejor decisión.
3Cuidado con los coches en desuso
Aunque pueda parecer atractivo un coche de segunda mano con muy poco kilometraje, debes tener cuidado. Primero debes asegurarte de que no se trate de un engaño. En la tarjeta de la ITV se especifican los kilómetros recorridos. Pero en caso de ser real, también debes pensarte bien la decisión y saber a ciencia cierta, cuanto tiempo ha estado en desuso ese vehículo.
Cuando un coche ha estado parado durante mucho tiempo, algunas piezas pueden deteriorarse. Las gomas, retenes y juntas tienden a volverse quebradizas y perder su eficacia con el paso del tiempo, independientemente del uso que se les haya dado. Esto puede resultar en fugas y costosas reparaciones después de haber sido sometido a un uso regular.