Aunque Mercedes no puede dormirse en los laureles, la realidad es que el cambio que ha experimentado el GLA no es llamativo, parece que la gran revolución será con el GLA que llegue en 2019. No hay un diseño renovado profundamente (más allá de cambios en los paragolpes y los faros) ni grandes novedades en la gama de motores, al menos en España, porque el nuevo motor 220 4Matic de gasolina con 184 caballos no va a llegar, al menos por ahora, a España.
Pero eso no significa que no haya mejoras en su SUV compacto. Pero son mejoras de matiz, para afinar un modelo que ya era referencia y que ahora gana argumentos para seguir siéndolo. Así, la gama de motores se mantiene con dos propulsores diésel de 136 y 177 caballos y cuatro gasolina de 122, 156, 211 y 381 caballos de potencia. Tambíén se mantienen variantes de tracción delantera y total así como cambio manual de 6 velocidades o automático 7-G Tronic de 7 marchas. Se puede decir, por tanto, que hay un Mercedes GLA casi para cada tipo de conductor.
Y además, esas características se combinan con un tren de rodaje que ofrece tres alternativas, lo que aumenta, aún más, sus posibilidades. Por un lado el modo confort, por otro la altura rebajada y el modo confort off road (que aumenta la altura de la carrocería 30 milímetros) ideal para adentrarnos fuera de la carretera.
GLA 45 AMG, superSUV y superGTI
Todo esto que sobre el papel suena muy bien, hay que ponerlo en el asfalto o en la tierra y comprobarlo. Y eso hemos hecho en Budapest, donde la marca alemana ha celebrado una presentación de su gama de compactos (Clase A, CLA, CLA Shoooting Brake, Clase B y GLA). Allí, en el circuito de Hungaroring y sus alrededores hemos podido probar el GLA 45 AMG, con el motor de cuatro cilindros más potente del mundo. Sus 381 caballos y su cambio automático con levas en el volante convierten a este 'bólido SUV' en una fiera si ponemos el pie en el acelerador con contundencia. Pero en absoluto hablamos de una fiera indomable. Más bien lo contrario. Porque puede ser también animal más dócil que imaginemos y se puede circular con él de paseo gracias a su suavidad de funcionamiento y a la progresividad de su motor.
Las suspensiones son firmes pero en absoluto incómodas. La direccín es muy directa y no hace falta manotear sobre el volante para que el coche vaya por donde queramos. Da la sensación de que obedece automáticamente la trazada que el conductor selecciona con la mirada y la tracción total ofrece un plus de seguridad y control absoluto. Los frenos son contundentes y el chasis de altura rebajada ofrece las mismas sensaciones de un superGTI, con la ventaja de que el conductor va un poco más elevado. Son muchos los 381 caballos que ofrece y también muchos los 71.000 euros que cuesta; pero es buena alternativa para tener un GTI y un SUV de altos vuelos de los más exclusivo y a la vez. Posiblemente la única alternativa, sin las capacidades off road que ofrece este GLA sea el Audi RS3 Sportback, que ofrece 400 caballos.
Al día siguiente nos espera una versión más normal, el 220d con 177 caballos y también con cambio automático. Un modelo que garantiza elevadas prestaciones (7,7 segundos para el 0 a 100 km/h y 223 km/h de velocidad punta) y consumos muy bajos (4,2 l/100 km de media). El recorrido preparado, alrededor de 100 kiómetros entre Budapest y la fábrica de Kecskemét, donde se produce el Clase B, el CLA y el CLA Shooting Brake para todo el mundo era fundamentalmente por autopista. En él hemos podido descubrir un gran rodador en este GLA 220d. Cómodo y con buen empuje gracias a un motor con par máximo que se ofrece a tan solo 1.400 vueltas, lo que garantiza unas reacciones casi instantáneas. No es el 45 AMG; pero sobra con esta versión para ir muy rápido, con total comodidad y gastando mucho menos.
Conducción off road: sorprende
No solo en carretera hemos podido conducir el nuevo Mercedes GLA. En una pista off road en el circuito de Hungaroring, pudimos comprobar la capacidad del GLA fuera de carretera. Con el chasis off road Confort y la tracción total 4Matic, el GLA muestra una capacidad fuera de carretera muy destacable. Cuenta con control de descenso de pendientes -que funciona entre 4 y 18 km/h- y suma dos dispositivos muy útiles, la cámara de visión de 360 grados que permite ver lo que pasa bajo las ruedas en cuatro cuadrantes: delante, detrás, y a cada uno de los lados. El conductor puede elegir en cada momento qué zona necesita ver para un recorrido seguro. Funciona hasta 30 km/h.
El otro dispositivo, igual de útil permite ver en la pantalla ver la inclinación, tanto lateral como frontal del coche en cada momento. Lo que ayuda a realizar las maniobras con total seguridad. El resultado del recorrido fue sorprendente. Muy ágil, su altura al suelo le permite adentrarse con garantías por lugares inhóspitos. Y sale sin problemas de las pruebas a las que lo sometemos. La prueba definitiva de que el nuevo Mercedes GLA es capaz de todo.