Kia tiene un filón en el Sportage, un modelo que desde su primera generación -lanzada en 1993- ha conquistado a más de cinco millones de clientes y que se ha convertido en el modelo más vendido de la marca, pues un 26 por ciento de los coches comercializados por Kia han sido Sportage. Por eso, cualquier cambio o retoque en un modelo que representa tanto en una marca, debe ser realizado con mucho mimo.
Así ha sido en esta actualización del Sportage, que no solo ha sido retocado con mimo en el aspecto estético sino que también se ha reforzado con elementos de seguridad y ayuda a la conducción o con una gama de motores que se ha visto renovada y a la que se suman nuevos sistemas enfocados a conseguir las mejores cifras en lo relativo a consumos y emisiones. Y si hablamos de otras ventajas significativas para los clientes, como un equipamiento muy completo o la consabida garantía de 7 años de Kia, tampoco faltan en este nuevo Sportage.
Retoques estéticos
En el aspecto del diseño, hay toques que le dan un aire más aventurero al nuevo Sportage, sobre todo en la zona inferior, donde incorpora nuevas molduras y difusores rematados en aluminio. También es nueva la parrilla y la firma luminosa, tanto en la parte delantera como en la trasera tiene más presencia. Nuevos diseños de llantas -de 16, 17 y 19 pulgadas- rematan la vista exterior del coche.
En el interior los cambios son más de detalle, aunque evidentes. Por ejemplo el volante y el panel de instrumentos son de nuevo diseño, así como las salidas de ventilación. Y en el centro del salpicadero dispone de una pantalla de 8 pulgadas en las versiones más equipadas, siendo de 7 en las de entrada a la gama. Y si hablamos del acabado GT Line, da su toque deportivo con un techo en negro o con los pedales de aluminio, característicos de los modelos más dinámicos.
Si nos fijamos en los sistemas de ayuda a la conducción vemos que cuenta con los últimos avances como control de crucero adaptativo inteligente con función de parada y arranque automáticos, un monitor del entorno (Around View Monitor) y control de fatiga del conductor (Driver Attention Warning). Y suma asistente de colisiones frontales, de mantenimiento en el carril, cambio de luces largas, aviso inteligente de límite de velocidad, aviso de ángulo muerto y de tráfico trasero.
Los sistemas de conectividad también son destacables; y el Sportage puede disponer de pantalla táctil de 7 u 8 pulgadas. Y en todos ellos se ofrecen de serie los Servicios Conectados de Kia, proporcionados por TomTom, con una gran gama de aplicaciones telemáticas e información como el tráfico en tiempo real, localización y alertas de radares de velocidad, búsquedas locales o previsiones meteorológicas. Y como novedad también muestra el precio del carburante en las estaciones de servicio cercanas, así como la ubicación de lugares para aparcar en tiempo real.
Nuevos motores y estreno del Mild Hybrid
La parte mecánica cuenta con una gama de motores que son nuevos en algún caso y renovados en profundidad en otros. En el primer caso, el de los motores nuevos, la gran noticia viene de la mano del 1.6 U3, un motor de nuevo diseño -curioso que en estos tiempos de persecución del diésel Kia desarrolle un motor totalmente nuevo- que sustituye al clásico 1.7 CRDI. Está disponible con 115 y 136 caballos. Las dos versiones son de tracción delantera y con cambio de seis velocidades, aunque el de 136 caballos puede optar por la tracción total y un cambio automático de doble embrague y siete marchas.
En gasolina el motor 1.6 GDI ha sido retocado para hacer más eficiente y suave en su uso. Incorpora un nuevo filtro de partículas que reduce aún más las emisiones y está disponible con 132 y 177 caballos, en este caso dotado de turbocompresor. Tracción delantera y cambio manual de seis marchas y en opción el 177 caballos se ofrece con cambio automático de doble embrague y tracción total.
Y como tope de la gama diésel y posiblemente conjunto propulsor más tecnológico, Kia ofrece el 2.0 CRDI con 184 caballos y sistema Mild Hybrid de hibridación ligera; un sistema que por el momento solo se ofrece con este motor pero que en 2020 llegará al motor diésel más pequeño. Cuenta con una batería de 48 voltios que ofrece apoyo al motor de combustión cuando este necesita más empuje. Y en modo 'generador' acumula energía que se almacena al frenar o si circulamos en modo retención, en pendiente. De esta manera puede ofrecer una función de parada y arranque en marcha en la que apaga el motor diésel y permite circular 'a vela' si no pisamos el acelerador. Y el sistema se pone en marcha de manera imperceptible al pisar de nuevo el acelerador. El resultado es una rebaja en las emisiones y los consumos de hasta un 4 por ciento gracias a este sistema.
Suave, eficiente y con carácter en marcha
El recorrido de la presentación nos lleva hasta la provincia de Alicante, donde viajamos desde la capital a Javea, por autovías y carreteras de doble sentido. Nuestro compañero de viaje es el Sportage 1.6 diésel de 136 caballos con cambio automático y tracción total, el modelo que no habíamos podido conducir en nuestra primera toma de contacto con el Sportage el pasado mes de julio en Fráncfort. Esta version intermedia nos sorprende por su refinamiento y suavidad, sobre todo cuando lo comparamos con el 1.7 CRDI al que se le notaban los años en ciertos comportamientos un tanto ásperos en su funcionamiento. Sin embargo, este nuevo motor casi no delata su origen diésel ni en sonido ni en vibraciones. El cambio es rápido y muy suave, con una transición entre marchas que casi no se nota; y nuestra unidad disponía de levas en el volante (opcionales en los acabados GT Line Essentia y GT Line Extreme) para hacer aún más intuitivo el manejo del cambio.
Lo que sí se nota es empuje más que suficiente, pues los 320 Nm de par se ofrecen ya a partir de solo 2.000 revoluciones. La dirección es muy agradable y dispone de la dureza justa y los frenos son correctos. Y en cuanto a las suspensiones cuentan con un tarado muy bien ajustado para ofrecer gran compromiso entre confort y conducción. No se puede decir que el comportamiento sea deportivo pero sí muy dinámico.
Como se ve, el nuevo Sportage sigue sumando argumentos para mantenerse en lo más alto de la marca, pero también, en lo más alto de un segmento cada vez más importante y de mayor peso. Si a ello sumamos que cuenta con una garantía de 7 años o 150.000 kilómetros que ninguna otra marca se atreve a ofrecer o que su gama de preciosarranca en poco más de 18.000 euros sumando todos los descuentos y con un equipamiento ya muy completo en el que no faltan 8 airbags, control electrónico de estabilidad, control de descenso de pendientes, sistema de arranque en pendiente, control de tracción, barras de techo, luces LED, volante y palanca de cambios en cuero, cámara trasera, sistema de infoentretenimiento con pantalla de 7 pulgadas, aire acondicionado o control de crucero y sensor de luces.
Muchos argumentos, por tanto, para seguir siendo un éxito.