La historia de un conductor algo mas que eufórico, las confusiones nocturnas, y la hilaridad de un post en el Facebook de la Policía Local.
En una noche invernal en Jaén, el viento soplaba con fuerza, y las temperaturas alcanzaban los 2°C, creando el escenario perfecto para la congelación de neuronas y la toma de decisiones cuestionables. Manuel, el vendedor estrella de electrodomésticos, protagonizó un capítulo digno de las páginas más surrealistas de los sucesos.
4Las consecuencias de una historia demasiadas veces real
Ahora, veamos las consecuencias prácticas de las imprudencias de Manuel. En España, las tasas de alcoholemia permitidas son las siguientes:
- Hasta 0,25 g/l: No se considera infracción.
- De 0,25 g/l a 0,50 g/l: Infracción administrativa con multa de 500 euros y pérdida de 4 puntos del carné de conducir.
- Más de 0,50 g/l: Delito penal con sanciones más severas, que pueden incluir penas de prisión, multas sustanciales y la retirada del carné de conducir.
En el caso de Manuel, con sus 0,80 g/l, cruzó la delgada línea que separa la imprudencia de la irresponsabilidad extrema. Además de enfrentarse a las sanciones legales, también se topó con la dura realidad de la ley: detención inmediata y una visita a la comisaría y al juzgado.