En los últimos años, los patinetes eléctricos se han vuelto una opción popular para la movilidad urbana. Por su diseño compacto, facilidad de uso y sostenibilidad, han ganado muchos adeptos en todo el mundo. Pero ¿dónde están los límites? En un reciente vídeo viral en Instagram, un usuario en patinete adelanta coches a gran velocidad en una autopista, desafiando las leyes de tráfico y el sentido común. La escena ha abierto un debate sobre el lugar de estos vehículos en el entorno de las ciudades.
2El límite entre lo práctico y lo temerario
En el vídeo de Instagram, el usuario del patinete eléctrico llega incluso a tener el descaro de adelantar un coche de policía. La escena reabre el debate sobre los límites de estos Vehículos de Movilidad Personal (VMP). Los patinetes están diseñados para la ciudad, con velocidades promedio de unos 25 km/h. Pero existe una realidad preocupante: algunos usuarios no respetan los límites de velocidad ni las normas de circulación.
Este tipo de conductas temerarias no solo pone en riesgo la vida del conductor, sino también la de los demás usuarios de la vía. Las autopistas están diseñadas para vehículos pesados que viajan a altas velocidades. Un patinete eléctrico, ni lo tiene permitido, ni está equipado para circular por ellas. La falta de protección y la alta exposición a los elementos hacen que cualquier accidente pueda tener consecuencias fatales.