Los problemas vecinales son una fuente constante de tensiones y conflictos en las comunidades de vecinos. Uno de los temas más delicados y recurrentes, que quizás te haya pasado, se relaciona con la ocupación de las plazas de aparcamiento en garajes compartidos.
En este contexto, dos irregularidades destacan por su frecuencia y potencial para desencadenar disputas. Por un lado, la ocupación indebida de una plaza de garaje por dos vehículos y, por otro, el estacionamiento de un automóvil de manera que sobresalga de los límites de la plaza asignada. En estas líneas exploraremos estas cuestiones, sus implicaciones legales y cómo abordar estas situaciones de conflicto vecinal.
2¿Puede tu coche sobresalir de la plaza de garaje?
Otro punto de conflicto común en comunidades de vecinos es el estacionamiento de un vehículo de manera que sobresalga de los límites de la plaza de garaje asignada. La ley de propiedad horizontal es clara al respecto, estableciendo que el derecho de uso de una plaza de garaje se extiende solo hasta los límites de su superficie útil. En otras palabras, un vehículo no puede invadir ni siquiera tocar la línea que delimita la plaza de garaje ni sobrepasar sus límites exteriores con la carrocería.
La única excepción a esta regla es la parte del vehículo que puede salirse de la plaza de garaje, que son los retrovisores. Dado que son piezas móviles y retráctiles, es posible que sobresalgan al maniobrar o estacionar. Lo mismo se aplica a las puertas, que solo pueden sobresalir al abrirse para entrar o salir del vehículo. Cualquier otra parte del automóvil que sobresalga de la plaza de garaje incumple la ley y puede dar lugar a problemas legales.