Lo más aconsejable ante una tormenta fuerte es parar nuestro vehículo y esperar a que remita la situación; eso sí, siempre que podamos hacerlo de forma segura y en un sitio adecuado.
2El coche es un lugar seguro para protegerse de los rayos
Si se trata de una tormenta eléctrica, no tema, pues el coche es un lugar muy seguro para resguardase de los rayos. En primer lugar las ruedas de goma aislan el coche del suelo, por lo que la corriente no encontrará en el vehículo un lugar por el que alcanzar la tierra. En segundo lugar, la carrocería del vehículo es conductora de la corriente eléctrica. En caso de ser alcanzada por un rayo, la carga eléctrica se distribuirá por toda la superficie metálica pero no conseguirá penetrar en el interior.
Si no se tocan las partes metálicas de la cabina, los pasajeros estarán perfectamente seguros. Es lo que se conoce como Jaula de Faraday. Que los ocupantes no sufran daños no quiere decir que el vehículo salga indemne, pues la electrónica de a bordo y la pintura, en el lugar del impacto, quedarán seriamente perjudicadas.