Como resumen de la DGT, conducir con hielo, mas que habilidad que también, requiere de prudencia y anticipación especialmente. Y si bien la habilidad, que no dejamos de pensar es importante, se adquiere con la experiencia y el rodamiento, la prudencia y la anticipación son cualidades que ya vienen en el propio conductor y bastaría con ponerlas en practica atendiendo a las condiciones meteorológicas, para identificar el estado de la calzada y la revisión del vehículo, para tener seguridad en el uso del mismo.
2Todos informan, pocos forman
Ante estas situaciones, tanto la Dirección General de Trafico, y de manera constante, como las asociaciones de conductores, las compañías de seguros y las propias autoescuelas, no se cansan de enviar mensajes recordatorios, de como se debe atender a una situación de riesgo por hielo a fin de evitar el accidente, para lo que decretan una lista de consejos a seguir y con los que la conducción sobre hielo debería ser harto mas segura.
De manera general los principios que argumentan estas actuaciones de seguridad en la conducción, especialmente en invierno, son los controles sobre la velocidad adecuada y la distancia de seguridad respecto de los vehículos precedentes. Esto es así desde el momento en que la aparición de un imprevisto (o anunciado) cambio meteorológico, afecta principalmente a dos factores importantes de la conducción; en primer lugar puede disminuir la visibilidad y en segunda instancia puede reducirse el nivel de adherencia entre el neumático y la calzada.