La avería o disfunción de un sistema técnico o mecánico, es consustancial, y aunque evitable, siempre existe el riesgo de sufrirse.
Las nueva tecnología de motorización que conocemos como híbridos, no esta exenta de problemas y averías, a pesar de las muchas ventajas que ofrece al usuario que decide introducirse en este mundo eléctrico.
3El inversor: Otra pieza clave en los híbridos
Podemos definir el inversor como el elemento que se encarga de dos misiones cruciales en el funcionamiento del coche eléctrico. Por un lado transfiere la energía entre los diferentes elementos del coche eléctrico, como de la batería al motor o de los frenos a la batería, y además transforma esa energía según las necesidades, modulando el voltaje y el tipo de corriente.
El motor de un coche eléctrico tiene que funcionar de manera suave y predecible desde cero RPM hasta cientos de RPM. Este nivel de control se consigue con un motor de corriente alterna (CA) que cambia su voltaje todo el tiempo de forma cíclica pero de forma suave.
El inversor se encarga de transformar la energía eléctrica almacenada en la batería en energía eléctrica de corriente alterna. El inversor puede sufrir problemas debido a la falta de refrigeración o un uso intensivo. Reemplazar el inversor puede ser costoso, por lo que es importante cuidarlo y realizar un mantenimiento adecuado para prolongar su vida útil.