Nadie quiere recibir multas. Son el enemigo, el coco, dueñas de nuestros miedos y protagonistas de nuestras pesadillas. Las hay de todos los colores, pero algunas de las más graves se dan en relación con los cristales de nuestro vehículo. Según el Reglamento General de Circulación, por ejemplo, no pueden ir sucios, ni con nieve o hielo.
Ya sabes que tanto el parabrisas como el resto de los cristales del coche tienen una función primordial: ofrecer una correcta visibilidad al volante. Parece lógico pensar, por tanto, que estos deben estar en buen estado. Además, las ya cada vez más mencionadas cámaras de seguridad ADAS suelen situarse detrás de la luna, en el espejo retrovisor interior.
3Multas por conducir con adhesivos en los cristales
Las pegatinas valen para lo que valen… y nunca pueden impedir la visibilidad. Seguramente estarás pensando en la pegatina de la ITV o en el distintivo medioambiental de la DGT. Pues bien, la pegatina de la ITV ha de ir colocada en el ángulo superior derecho del parabrisas y la del distintivo ambiental de la DGT, en la esquina inferior derecha. Esto está totalmente regulado.
Sin embargo, circular con adhesivos mal colocados o con un soporte para teléfono móvil adherido al parabrisas en una zona que interfiera en una correcta visibilidad puede suponer una sanción de 200 euros sin pérdida de puntos.