Observar, señalizar y situarse correctamente es fundamental para afrontar los cruces sin señalizar con toda la seguridad posible. Sabemos de sobra que una intersección es un punto crítico. En él se encuentran vehículos procedentes de distintas trayectorias… que en muchos casos pueden tener, además, distintos criterios sobre el cruce y la prioridad. Riesgo asegurado.
Si, además, el cruce en cuestión carece de señales o semáforos que establezcan la prioridad de paso, la complejidad de la maniobra puede llegar a ser mucho mayor. Y es que, cuando un conductor se aproxima a una intersección sin preferencia señalizada, debe prepararse para tomar una decisión en pocos segundos: detenerse y ceder el paso o, de lo contrario, continuar la marcha.
3¿Quién tiene la prioridad? Entrada
No cabe duda de que este es el momento más importante en los cruces. El conductor observa a derecha e izquierda, valora y decide. Pero ojo, debe hacerlo siempre en condiciones óptimas de visibilidad. Si no ve a la perfección la circulación transversal, tiene que continuar con precaución hasta tenerla. La norma a aplicar en este momento es sencilla: ceder siempre el paso a la derecha, como hemos comentado, teniendo en cuenta que existen excepciones.