Según los datos de la DGT, en 2023 fallecieron en nuestro país 1.145 personas en siniestros de tráfico. Unas vidas que costarían 2.290 millones de euros, según un informe que acaba de presentar la Dirección General de Tráfico y que pone sobre la mesa el coste económico que supone a la sociedad cada vida que se pierde en un accidente en nuestras carreteras.
Y es que, a los costes humanos de los siniestros de tráfico, hay que sumar los económicos. El estudio encargado por la DGT y realizado por la Universidad de Murcia con la colaboración de Sigma Dos, concluye que el valor por evitar o prevenir un fallecimiento en un siniestro de tráfico es de 2 millones de euros.
Esta cantidad tiene en cuenta que 1,9 millones es el valor estimado de una vida estadística, cifra a la que se han sumado los costes de la producción neta perdida a consecuencia de la mortalidad prematura, así como los costes médicos y de los servicios de emergencia.
3¿Cómo se realizó el estudio de la DGT?
El método utilizado para realizar este informe de la DGT parte de la llamada “disposición a pagar”, que se basa en encuestas realizadas a una muestra de personas para conocer cuánto dinero estarían dispuestas a pagar por viajar de manera más segura. A esta cifra se suman luego otras como las pérdidas de productividad y los costes sanitarios.
En concreto, se llevaron a cabo dos encuestas, cada una de ellas con 2.000 personas representativas demográfica y geográficamente de la población española.
A partir de las respuestas a la primera encuesta, los investigadores calcularon el Valor de Prevenir un Fallecimiento (VPF) por un siniestro de tráfico, sumando al Valor de la Vida Estadística (VVE), las pérdidas netas de capacidad productiva debidas a la muerte prematura de la víctima, junto con los costes asociados a la atención sanitaria, que comprenden gastos médicos y de transporte en ambulancia.
La segunda encuesta sirvió para estimar el Valor de Prevenir un Herido (VPH), mediante la suma del Valor de la Víctima no Mortal y las pérdidas de capacidad productiva, junto con los costes relacionados con la atención sanitaria. Además, en este segundo análisis, también se calculó el Valor Monetario del Año de Vida Ajustado por la Calidad en el contexto de la siniestralidad vial. El Año de Vida Ajustado por la Calidad es una medida sintética que combina cantidad y calidad de vida.