El embrague es una pieza vital en los coches de cambio manual y también una de las más caras de arreglar, en algunas marcas ronda los 1.000 euros. Es una parte muy sensible a las malas costumbres a la hora de conducir y puede sufrir un desgaste anticipado, que podía haber sido evitado conociendo los trucos que leerás a continuación.
Un embrague bien utilizado debería aguantar entre 200.000 y 300.000 km. Lo más habitual es que el embrague se acabe estropeando antes debido a un mal manejo del propietario. Si notas que tienes que subir mucho el pie para que el coche salga, seguramente tu embrague haya sufrido un desgaste notable. Para evitar que esto vaya a más, aprende cuáles son las malas praxis que están estropeado tu embrague y empieza a cuidar esta pieza tan importante.
3Encuentra el punto de embrague
Una mala sincronización entre los pedales de embrague, freno y acelerador, es otro de los errores que más consumen el embrague. Debes soltar el embrague suavemente y cuando notes que ha llegado al punto de fricción tendrás que pisar el acelerador. Si aceleras poco el motor se calará y se pisas demasiado rápido lo revolucionarás y saldrás patinando embrague. Tienes que encontrar el término medio.
Si no sabes que es el punto de fricción, es cuando al ir soltando lentamente el embrague, empiezas a notar la fuerza del motor y a sentir que el coche quiere salir hacia delante. Cuando notes eso ha llegado el momento de pisar el acelerador.
