Con el cambio de año, llegan también nuevas normativas que ponen en jaque a más de un conductor. Desde enero de 2025, las tasas de alcoholemia permitidas en España han sufrido una reducción histórica: ahora, el límite se sitúa en 0,2 gramos por litro de sangre o 0,1 miligramos por litro en aire espirado . Para que lo entiendas mejor, esto significa que incluso una sola bebida podría ponerte al filo de la infracción.
Este cambio responde a una realidad alarmante: el alcohol sigue siendo uno de los principales responsables de los accidentes de tráfico . Según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT), en 2024 más de 300 personas perdieron la vida en siniestros relacionados con el consumo de alcohol, y de los más de 200.000 controles realizados, 2.100 conductores dieron positivo .
Pero, ¿qué significa realmente esta reducción de la tasa para los conductores? Vamos a desgranarlo.
2¿Por qué no hay un límite cero?
Aunque países como Hungría, la República Checa y Eslovaquia han implementado límites de alcoholemia cero, en España la DGT ha optado por un enfoque más pragmático. Con un límite de 0,1 mg/l en aire espirado , se evita que factores como ciertos medicamentos o alimentos con trazas de alcohol, como bombas de licor, generen falsos positivos.
Este margen mínimo busca un equilibrio entre seguridad y realismo, permitiendo que las normas sean aplicables sin complicar excesivamente la vida de los conductores responsables.
