Repostar gasolina es una tarea habitual para cualquier conductor, pero lo que puede parecer un simple trámite de rutina tiene un impacto directo en la salud de tu vehículo. Más allá de la cuestión del precio de los combustibles, que suele monopolizar la atención, hay razones técnicas y prácticas que justifican mantener el depósito de gasolina de tu coche al menos de la mitad para arriba. Si eres de los que esperas a que la aguja roce el límite de reserva para repostar, presta atención: podrías estar perjudicando tu coche sin saberlo.
4Seguridad y tranquilidad
Más allá de las razones técnicas, mantener el depósito lleno también tiene un impacto en tu tranquilidad como conductor. Nadie quiere quedarse sin combustible en medio de un trayecto, especialmente en carreteras secundarias o zonas con pocas estaciones de servicio. Un depósito lleno te da un margen de seguridad para afrontar imprevistos, como atascos, desvíos o emergencias.
Además, repostar con frecuencia y evitar apurar la reserva es una buena práctica para gestionar mejor el gasto en combustible. Aunque puede parecer que llenar el tanque es más costoso en el momento, en realidad contribuye a un mantenimiento más eficiente del coche, evitando gastos mayores a largo plazo.