El propósito de la Dirección General de Tráfico(DGT) durante años de constante trabajo, es reducir el número de accidentes y la mortalidad en nuestras carreteras. Últimamente se ha avanzado en distintas líneas, que van desde la colaboración con otras Administraciones en la mejora de infraestructuras, hasta la adopción de nuevos límites de velocidad y medidas que inciden en la sensibilización de los usuarios.
No obstante, los accidentes evitables siguen siendo una alarmante variable, sobre la que se pretende actuar aportando las herramientas necesarias para conocer en tiempo real peligros que los conductores se encuentren durante el trayecto, minimizando así la posibilidad de sufrir un accidente, pudiendo anticiparse a la toma de decisiones con el fin de no poner en riesgo la seguridad vial.
2Esperando la capacidad suficiente y necesaria
Un factor a tener en cuenta es la llegada definitiva de la tecnología 5G, que facilita enormemente la transmisión de datos, toda vez que la velocidad en este proceso de comunicación aumenta 50 veces frente a la ya casi obsoleta 4G.
Con este escenario hablar de vehículo conectado es hablar de inmediatez absoluta o conocimiento en tiempo real. Mientras se consiga mantener la privacidad de los usuarios, los beneficios que esta tecnología puede establecer para mejorar la seguridad vial, son de un valor nada despreciables.
Recopilará la información de todas aquellas averías o accidentes que se producen en carretera en los que el vehículo o su carga obstaculizan la calzada, gracias a que la normativa de tráfico sustituye el uso de los triángulos de pre-señalización de peligro por el uso de un dispositivo luminoso y dotado de conectividad denominado “señal V-16”.
