El verano no es una época normal. Llegan los desplazamientos masivos hacia los populares destinos en los que muchos españoles van a pasar sus vacaciones. Lugares turísticos, con mucha acogida cada año, que nos permiten desconectar de la rutina. Pero para desembocar en nuestro destino tenemos que lidiar antes con un viaje, normalmente largo, en el que no podemos levantarnos con el pie izquierdo. No valen excusas porque la carretera tiene que ser nuestra prioridad. Máxima atención y precaución.
Es también el momento en que muchos conductores cometen una infracción de la que no son conscientes. La Dirección General de Tráfico nos ha dejado todo un mar de nuevos supuestos de sanción con la nueva ley de tráfico, publicada en marzo… pero hay cuestiones mucho más comunes. Por ejemplo, el uso del carril central y el izquierdo. La DGT avisa siempre sobre cuándo se pueden utilizar, pero aún quedan conductores que no cumplen las normas.
3200 euros por no usar bien los carriles izquierdo y central
La norma no solo define correctamente cómo se debe utilizar este carril. También, determina una sanción concreta si incumples las directrices marcadas de antemano. En este caso, utilizar el carril central y el izquierdo en condiciones no reglamentarias conlleva una multa de hasta 200 euros.
En principio, se considera solo una sanción económica, sin retirada de puntos. Esto es algo que difiere de otra conducta bastante habitual en las autovías y autopistas, la de no respetar la distancia de seguridad y “acosar” al coche que va delante para que se aparte. La diferencia es que esta infracción está penada con la pérdida de cuatro puntos.
