En un pasado no tan lejano, la Dirección General de Tráfico (DGT) y la Escuela CEA de Conducción Segura y Eficiente se unieron para proporcionar valiosas recomendaciones a los conductores con el objetivo de ahorrar gasolina y hacer su conducción más segura y ecológica.
Estas sugerencias, como la de cambiar a segunda marcha a los 2 segundos o 6 metros aproximadamente, y mantener la velocidad uniforme para evitar frenazos innecesarios, se convirtieron en consejos fundamentales para muchos conductores.
8La responsabilidad compartida: educación y concienciación
Recuperar las prácticas de conducción eficiente no solo recae en los conductores individuales, sino también en la educación y concienciación continua. Las autoridades de tráfico, las autoescuelas y las organizaciones relacionadas con la seguridad vial tienen un papel crucial en recordar y promover estas recomendaciones. Campañas de concienciación y programas educativos pueden desempeñar un papel fundamental en mantener viva la importancia de una conducción eficiente.
Además, la inclusión de módulos específicos sobre conducción eficiente en los programas de formación para nuevos conductores podría asegurar que las generaciones futuras estén mejor informadas sobre la relevancia de estos hábitos. La responsabilidad compartida entre conductores, instituciones educativas y organismos de tráfico puede crear un impacto significativo en la adopción de prácticas de conducción más eficientes y sostenibles.