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Los animales que provocan más accidentes en España y las comunidades más afectadas, según la DGT

El año pasado hubo en España 35.661 accidentes en los que estuvieron implicados animales. Esto supone, según los datos de la Dirección General de Tráfico, DGT, que cada día se producen en nuestro país 97 siniestros de este tipo. Además, en ellos 35 personas tuvieron que ser hospitalizadas, otras 637 resultaron heridas y hubo 2 fallecidos.

Son los datos del informe más amplio realizado hasta la fecha por la DGT sobre los siniestros de tráfico con implicación de animales, en el que se han tenido en cuenta tanto los domésticos como los silvestres. Unas cifras que evidencian que este tipo de accidentes son cada día más frecuentes en las carreteras españolas.

Según la DGT, la radiografía de la accidentalidad con animales en España revela que el número de accidentes con daños materiales en el vehículo ocasionados por un animal ha aumentado desde 2013, llegando a duplicarse en una década. En cambio, el número de fallecidos, heridos hospitalizados y heridos leves se ha ido reduciendo de forma progresiva. El 86% de los siniestros con víctimas personales y animales implicados registrados en 2022 se produjeron en carreteras convencionales, sobre todo en dos comunidades autónomas y con un animal especialmente involucrado.

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Recomendaciones de la DGT para evitar estos accidentes

Aunque desde las distintas administraciones se están adoptando medidas que ayudan a reducir la siniestralidad por accidentes con animales, como el refuerzo de la señalización vertical P-24, de paso de animales en libertad, a la que se le han incorporado luces rojas destellantes, cuando circulamos por vías en las que puede haber una mayor frecuencia de animales, la DGT recomienda:

  • Respetar la velocidad establecida, que suele ser una velocidad específica menor para un tramo concreto.
  • Estar muy pendiente de las cunetas y medianas, que es por donde suelen aparecen los animales.
  • En caso de impacto inminente, no dar nunca volantazos, frenar a fondo, pero levantando el pie del freno en el último momento para evitar que la parte delantera del vehículo se incline hacia abajo, puesto que, si es así, el animal después de impactar con el frontal del vehículo es más fácil que salte hacia el parabrisas, con el consiguiente incremento del peligro para los ocupantes del vehículo.

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