La revolución de los coches autónomos ha llegado, prometiendo cambiar para siempre la forma en que nos desplazamos. Estos vehículos, capaces de circular sin intervención humana, han despertado un gran entusiasmo por sus posibles beneficios en términos de seguridad vial, reducción de emisiones y optimización de la infraestructura.
Sin embargo, este avance tecnológico no está exento de desafíos legales, éticos y sociales que requieren una cuidadosa consideración y regulación.
4Una ley específica en el horizonte
Otro cambio crucial en el panorama legal será la aprobación de una ley específica sobre los coches autónomos. Esta ley abordará aspectos jurídicos, éticos y sociales, definiendo la responsabilidad civil y penal de fabricantes, conductores y usuarios. También se ocupará de la protección de datos personales, la ciberseguridad de los vehículos y los criterios de decisión de los sistemas de conducción automatizada en situaciones de riesgo.
Se espera que esta nueva legislación esté lista para el año 2024, alineándose con los objetivos de la Unión Europea de establecer un mercado único de movilidad automatizada y conectada.