Las inclemencias del tiempo propias de esta época del año dificultan la conducción, exigen mayor prudencia al volante y ponen en riesgo la seguridad vial. Por eso, la DGT pone especial énfasis en recordar a los conductores cómo deben circular cuando la meteorología es adversa.
Conducir con lluvia, viento, nieve, hielo, niebla o nieve requiere tener en cuenta algunos principios básicos, que la DGT nos recuerda ahora con varios vídeos, que ha colgado en los últimos días en sus redes sociales. ¿Sabes cómo reaccionar si te sorprenden al volante algunos de estos fenómenos meteorológicos?
3Consejos para conducir con nieve
En caso de que esté prevista una nevada, la DGT recomienda aplazar el viaje. Si esto no es posible, y no tenemos neumáticos de invierno, será imprescindible llevar cadenas y asegurarnos de que sabemos colocarlas. La nieve disminuye de forma radical la adherencia del vehículo, por lo que se recomienda reducir la velocidad, poner las luces de cruce, aumentar la distancia de seguridad, maniobrar, frenar o acelerar con suavidad. Es imprescindible llevar agua, algo de alimento, el móvil cargado y el depósito lleno.
- En la conducción en nieve se distinguen varios niveles:
- Nivel verde: Comienza a nevar. Se recomienda no sobrepasar los 100 km/h en autopistas y autovías y 80 km/h en el resto y evitar los puertos. Los camiones deberán ir por el carril derecho y no podrán adelantar.
- Nivel amarillo: la nieve cubre poco. Se prohíbe circular a camiones y vehículos articulados. Los turismos y autobuses deben ir a 60 km/h y se recomienda evitar maniobras bruscas y en curvas y descensos disminuir la velocidad.
- Nivel rojo: la carretera está cubierta. Se prohíbe circular a vehículos articulados, camiones y autobuses. Se recomienda no adelantar a vehículos parados si no se tiene la seguridad de poder continuar la marcha y es obligatorio circular con cadenas o neumáticos especiales a 30 km/h.
- Nivel negro: mucho espesor de nieve. Se prohíbe la circulación. Si nos quedamos bloqueados se recomienda utilizar la calefacción del motor y no abandonar el vehículo si no hay refugio. Ponerse a un lado para no obstaculizar la labor de los quitanieves.