Conducir sobre hielo o nieve puede ser una experiencia peligrosa. Cada invierno, cientos de conductores se ven envueltos en situaciones críticas por no estar preparados para las condiciones resbaladizas y desafiantes de la carretera. ¿Sabes qué debes hacer si pierdes el control del coche?
Las nevadas y heladas ponen a prueba las habilidades de los conductores. La adherencia al asfalto se reduce, convirtiendo cada trayecto en una situación de riesgo. Conscientes de ello, la DGT te da algunas claves para que enfrentes esas condiciones como si fueras un piloto entrenado para la competición. ¿Quieres saber cuáles son? En este artículo, te las desvelamos.
4Cadenas, neumáticos de invierno y quitanieves
Contar con el equipamiento adecuado también puede marcar la diferencia entre llegar a tu destino o quedarte atrapado en la carretera. Las cadenas de metal son una solución efectiva, pero su instalación puede resultar complicada si no se tiene práctica. Las cadenas de tela, de fácil colocación, son una buena alternativa.
Otra opción son los neumáticos de invierno u ‘all season’. Ofrecen un equilibrio sorprendente, proporcionando buena adherencia en condiciones de nieve y hielo, sin tener que cambiar las ruedas durante el año. En cuanto a las quitanieves, la DGT pide extremar la precaución y no acercarse demasiado a ellas, pues a su paso pueden dejar trazas de nieve dura o hielo que podrían hacer patinar el coche.