El director de la DGT ha sido contundente en sus declaraciones. «Avisar sobre los controles policiales a través de las redes sociales socava gravemente la seguridad vial, ya que permite a los infractores eludir la ley, poniendo en riesgo la vida de todos los usuarios de las vías«, afirmó Navarro. Además, calificó esta práctica como «un acto insolidario que atenta contra la línea de flotación de la seguridad vial».
Debido a esto, y tras años de preocupación expresada por el Sector de Tráfico en Galicia, la Fiscalía de Seguridad Vial, la organización Stop Accidentes, la Asociación Pro Guardia Civil y la propia Dirección General de Tráfico (DGT), se ha decidido tomar medidas para restringir el uso de aplicaciones que alertan sobre los controles policiales y aumentar las sanciones, actualmente limitadas por la Ley de Seguridad Ciudadana.
2DGT de Galicia siente precedentes
Tras la resolución de estas sanciones iniciales, tanto Policías Locales en Galicia como Comandancias de la Guardia Civil en otras comunidades están siguiendo el ejemplo del Sector de Tráfico en Galicia, presentando denuncias ante las Subdelegaciones del Gobierno para frenar la actividad de estas empresas. Actualmente, el Sector de Tráfico en Galicia tiene en curso otras investigaciones por avisos de operativos policiales en Pontevedra y Lugo, entre otros lugares.
En una primera fase, las autoridades se centrarán en perseguir a las aplicaciones y administradores de grupos de WhatsApp que difunden estos avisos. Posteriormente, se enfocarán también en los usuarios de estos canales, considerándolos colaboradores en la posible comisión de delitos, ya sean de seguridad vial o de naturaleza criminal. Desde Stop Accidentes, se reconoce la dificultad de prohibir estos avisos a través de apps o redes sociales, y se urgió a imponer sanciones más severas no solo a las empresas promotoras, sino también a sus usuarios.
Por otro lado, el colectivo Automovilistas Europeos Asociados (AEA) rechaza tanto la prohibición como las sanciones por divulgar la ubicación de radares o puntos de control. Según su presidente, Mario Arnaldo, las tecnologías hacen imposible restringir esta información. En su lugar, propone medidas preventivas como la instalación de alcoholoks o sistemas que bloqueen el uso del móvil si el coche está en movimiento.
