La Dirección General de Tráfico (DGT) continúa siendo protagonista en la implementación de innovadoras soluciones para mejorar la seguridad en las carreteras españolas. En esta ocasión, surge una técnica vanguardista que tiene como objetivo prioritario resguardar la integridad de todos los usuarios: la instalación de radares en áreas de construcción y obras.
Estos radares representan un paso adelante en la búsqueda constante de reducir los riesgos en las vías, haciendo hincapié en el cumplimiento de los límites de velocidad temporales en zonas de obra, que muchos conductores pasan por alto.
3Hacia una seguridad vial mejorada mediante la tecnología
El propósito fundamental detrás de esta medida reside en disminuir la cantidad de accidentes y mitigar el peligro que afrontan los trabajadores en estos contextos. En el año 2021, se registraron dos víctimas fatales y más de 150 accidentes derivados de atropellos en zonas de obras.
La DGT reconoce la urgencia de tomar medidas concretas para evitar tragedias similares en el futuro. Por consiguiente, la instalación de radares fijos y móviles en estas áreas específicas busca influir en el comportamiento de los conductores y promover el estricto respeto de los límites de velocidad temporales.
