Mantener nuestro coche en buen estado salva vidas. De hecho, según los datos de la DGT, está demostrado que la antigüedad del vehículo supone un factor de riesgo en un accidente de tráfico. En concreto, la posibilidad de fallecer o resultar herido grave en caso de accidente se duplica para los ocupantes que viajan en vehículos de 10 a 15 años de antigüedad, respecto a los ocupantes de coches de edad inferior a 5 años. Por este motivo, la DGT puso en marcha recientemente una campaña en la que los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil han revisado las condiciones de seguridad de 237.565 vehículos.
De todos los conductores a los que paró la DGT, 10.894 fueron sancionados por diferentes motivos, entre los que destaca especialmente no haber pasado la ITV. En concreto, el 56% de las multas interpuestas (6.137 denuncias del total de 10.962) lo fueron por esta infracción.
La DGT considera todavía más «preocupante» que, si se toman en cuenta las denuncias puestas por no tener la ITV en vigor en función del tipo de vehículo, este porcentaje asciende hasta un 65% en el caso de las furgonetas y hasta el 61% si hablamos de turismos. Por el contrario, solo el 8,5% de los autobuses y el 28% de los camiones controlados no tenían la ITV en regla.
Las infracción más sancionadas, según la DGT
¿Cuáles son los elementos del vehículo que peor cuidamos? Pues, la segunda posición de las denuncias de Tráfico la ocupan las que tienen que ver con el mal estado de los neumáticos, con 793 multas, seguidas de las interpuestas por no disponer de la documentación, ya sea del vehículo o del conductor, o por otras infracciones relacionadas con las placas de matrícula o el alumbrado.
En el caso de las furgonetas y los camiones, los agentes también controlaron las infracciones relativas al acondicionamiento de la carga (62 furgonetas y 113 camiones sancionados) o al exceso de peso (33 furgonetas y 110 camiones multados), y la manipulación del tacógrafo fue vigilada tanto en camiones como en autobuses (18 camiones y ningún autobús fueron sancionados).
Además, en los días que duró la campaña, la DGT inmovilizó un total de 92 vehículos al circular en unas condiciones que no reunían las garantías mínimas de seguridad.
Retirada de vehículos abandonados
La campaña también ha servido para poner en marcha una instrucción publicada por la DGT que permita gestionar el desguace y descontaminación de vehículos abandonados. Se estima que en la actualidad puede haber 20.000 vehículos abandonados en recintos como aparcamientos de centros comerciales, urbanizaciones privadas, garajes, comunidades de propietarios, aparcamientos de hoteles, etc.
La nueva interpretación del artículo 106 de la Ley de Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial establece un procedimiento administrativo ágil para que estos vehículos abandonados en recintos privados puedan llevarse a un centro autorizado de tratamiento para su desguace y descontaminación. De esta forma, los perjudicados no tendrán que acudir a la vía civil para que se proceda a la retirada de estos coches, ya que la Administración competente puede ordenar su traslado a un centro autorizado para su posterior destrucción y descontaminación.
La Administración deberá comunicar al titular del vehículo abandonado que se va a proceder a su retirada y desguace y esta tendrá un mes de plazo para actuar en consecuencia.
En caso de que el vehículo se encuentre aún en condiciones de uso, se establece la posibilidad de que la autoridad competente sustituya el tratamiento residual por su adjudicación a los servicios de vigilancia del tráfico, previa autorización del Jefe Provincial de Tráfico.