Exclusivamente la DGT tiene la facultad de acreditar formadores para enseñar a conducir a los aspirantes que optan al carnet de conducir.
En demasiadas ocasiones, bien los padres u otros conductores no autorizados, incumplen la normativa realizando practicas de conducción con aspirantes al carnet. Esto esta regulado y tiene graves consecuencias administrativas, y en caso de accidentes, pueden llegar a ser penales.
1La buena voluntad de un padre que resulta ser delictiva
Si bien es loable que los padres quieran trasmitir sus conocimientos a los hijos, revitalizando la relacion mientras aprenden a conducir, lo cierto es que, a parte de ser arriesgado, es ilegal.
Para encontrar justificación a lo que parece una norma contraria a los derechos que pensamos puede tener un progenitor, no hemos de investigar en las distintas leyes que sobre la materia se aplican en nuestro pais (ley de trafico, reglamento de conductores, etc…) basta con ir directamente al código penal.
En su articulo 384, queda claramente descrito que quien conduzca un vehículo a motor, toda vez que haya sido suspendida su licencia, estará cometiendo un delito castigado con pena de prisión de tres a seis meses o una multa que puede llegar a 2 años o bien obligado a realizar trabajos para la comunidad hasta 3 meses.