En España, la Dirección General de Tráfico (DGT) es la encargada de aplicar las leyes de tráfico con la finalidad de mantener un orden y una seguridad óptima en las carreteras. Esto implica la emisión de multas de tráfico a los conductores por incumplimiento de las normas vigentes.
Pertenecer a un país democrático implica la defensa y el respeto de los derechos individuales, entre los cuales se rige el principio del derecho a la queja o reclamación. Los conductores afectados por la emisión de una multa injustificada, pueden optar por recurrirla en busca de la justicia. A continuación, explicamos con detalle cada uno de los pasos a seguir durante el proceso de reclamación.
7Paso #7: Impulsar una demanda judicial
En el caso de obtener una respuesta negativa de la DGT tras haber realizado el descargo, solo hay una alternativa para continuar el recurso de la sanción: acudir a los Tribunales. Esta es la última fase del proceso y consiste en la presentación de una demanda específica ante el Juzgado de lo Contencioso Administrativo más cercano y esperar el resultado.
Para preparar la documentación es indispensable contar con un abogado especializado. El letrado deberá realizar la preparación del documento en el que se expresan de forma concisa los motivos de la reclamación así como toda la documentación acreditativa.
