Tenemos una nueva noticia para hoy: La propia DGT y el Ministerio de Fomento serán los responsables de tener que anular miles de multas.
En ocasiones las autoridades encargadas suelen cometer errores y es por ello que ahora tendrán que anular unas cuantas sanciones que impusieron hace poco a algunos conductores.
Y esto va a ocurrir porque se conoce que el dinero que recauda el organismo de la Dirección General de Tráfico por medio de las multas no está sirviendo para mejorar las carreteras.
3Para que las sanciones de la DGT sean válidas tienen que contar con requisitos
Lo que no puede hacer la DGT o Dirección General de Tráfico es poner multas así porque sí y es que, para que una sanción sea considerada válida, tiene que haber unos requisitos y la señalización ha de ser correcta.
¿Esto qué quiere decir?, pues que, si un conductor va circulando por determinada carretera y se percata de que hay una norma que está obsoleta o ya no existe y acaba recibiendo una sanción de este organismo, puede recurrir sin problema.
En el caso de que la norma establezca que tienen que existir dos señales, una a cada lado de la vía, para indicar el límite de velocidad de cualquier travesía y esto no llega a ser así, sería un bueno motivo para que la multa fuera anulada.
Aunque hay que mencionar que, por regla general, los tribunales son los que tienen la última palabra y en ciertas ocasiones las sentencias no han gustado para nada a la Dirección General de Tráfico.
Es por ello que los conductores han de ir atentos a la carretera y, en el caso de que puedan, tendrían que hacer fotos de las señales en el momento en el que pasaran cerca de las mismas con el fin de poder mostrar alguna prueba que otra.
