La Dirección General de Tráfico (DGT) ha decidido tomar cartas en el asunto ante los fallos endémicos de los motores Puretech, en colaboración con la marca, para advertir a los propietarios de vehículos Peugeot, especialmente los equipados con el motor 1.2 Puretech. Aunque Stellantis, la empresa matriz de Peugeot, ha intentado desvincularse de los problemas emitiendo comunicados que aseguran la resolución de los fallos, la realidad es que la demanda colectiva de propietarios afectados sigue en aumento.
En este contexto, la DGT ha enviado cartas de advertencia a los dueños de vehículos Peugeot equipados con motores Puretech, alertando sobre posibles problemas en la correa de distribución. Este componente es crucial para el correcto funcionamiento del motor, y su mal estado puede derivar en fallos graves. La recomendación principal es la sustitución de la correa cuando el vehículo alcance los 6 años o los 100.000 km.
3Nuevas perspectivas para el futuro
La colaboración entre la DGT y los fabricantes, como en el caso de Peugeot, para alertar sobre problemas específicos en vehículos es un paso positivo hacia la seguridad vial. Sin embargo, la eficacia de estas medidas depende en gran medida de la claridad en la comunicación y la consistencia en la información proporcionada.
Para los propietarios, la incertidumbre en torno a la sustitución de la correa de distribución destaca la importancia de buscar información directa y confiable, ya sea a través de los canales oficiales de la marca o mediante la consulta con profesionales en talleres especializados.
A medida que la demanda colectiva crece y los propietarios buscan soluciones, se espera que Stellantis y otras empresas involucradas aborden de manera proactiva estos problemas, ofreciendo respuestas claras y soluciones viables. La transparencia y la prontitud en la gestión de estos inconvenientes son fundamentales para restablecer la confianza de los propietarios y garantizar la seguridad y el rendimiento de los vehículos afectados.