El coste del combustible parece subir sin freno, lo que lleva a los conductores a buscar estrategias efectivas para reducir sus gastos en gasolina o diésel. A menudo, hemos compartido consejos útiles, como mantener la presión de los neumáticos en niveles adecuados y practicar una conducción suave.
Sin embargo, existe una estrategia muchísimo menos conocida pero igual de efectiva para aliviar el golpe a tu bolsillo: elegir sabiamente el día, así como la hora, para llevar a cabo el duro trance de llenar el depósito de tu vehículo. Ojo, puede ser menos doloroso de lo que te imaginas.
3El secreto de la hora ideal
Pero, no solo el día es importante, también la hora en que decides repostar. En general, la clave está en elegir las horas de menor demanda. Esto significa que llenar el tanque durante la noche o en las primeras horas de la madrugada puede ser altamente beneficioso.
¿Por qué estas horas son tan ventajosas? Primero, durante la noche y la madrugada, el combustible se encuentra a una temperatura más baja, lo que significa que ocupa menos volumen en tu depósito. Además, dado que la demanda es menor en estos momentos, las gasolineras suelen estar menos concurridas, lo que se traduce en una menor cantidad de burbujas de aire en el combustible.